Tranquilidad para tu familia
Posted by Javier Zavala on Wednesday, January 4, 2017
Cada día nos encontramos con personas, conocidas o vecinas que han perdido a un familiar. Algunas de esas pérdidas han sido por causas naturales, vejez o alguna efermedad. Otras han sido trágicas: un accidente automovilístico, algún descuido en el trabajo, malpráctica médica, suicidio o asesinato.
Todos, en mayor o menor tiempo estamos cercanos a ese momento final de nuestras vidas. Tal vez los temres y las creencia de que si no pensamos mucho en ese momento, la muerte se alejará de nosotros nos permite engañar a nuestra razón haciéndole creer que somos, algo así como "inmortales".
Pero no es así. Nuestra condición humana nos ofrece muchas maravilas, estamos hechos con polvo de estrellas, lamisma energía que mueve al Universo es la que mantiene nuestros átomos unidos, nuestros órganos funcionando, nuestra mente aprendiendo y produciendo conocimientos y tenemos VIDA. Pero, todo, incluido el mismo universo lleva en sí la marca del FIN.
No es lo mismo estar preparado para ese momento, que llegar a ese momento sin ningún tipo de preparación. Porque, cuando no hay ninguna clase de preparación, una persona muerta sólo deja a sus seres queridos, un simple cuerpo muerto.
Y la verdad es que, un cuerpo muerto representa no sólo dolor para esos seres queridos, sino todo un complejo transtorno en las personas y sus bienes, ya que, los gastos funerarios son, en la mayoría de los casos, un serio golpe a las finanzas personales.
Todos, en mayor o menor tiempo estamos cercanos a ese momento final de nuestras vidas. Tal vez los temres y las creencia de que si no pensamos mucho en ese momento, la muerte se alejará de nosotros nos permite engañar a nuestra razón haciéndole creer que somos, algo así como "inmortales".
Pero no es así. Nuestra condición humana nos ofrece muchas maravilas, estamos hechos con polvo de estrellas, lamisma energía que mueve al Universo es la que mantiene nuestros átomos unidos, nuestros órganos funcionando, nuestra mente aprendiendo y produciendo conocimientos y tenemos VIDA. Pero, todo, incluido el mismo universo lleva en sí la marca del FIN.
No es lo mismo estar preparado para ese momento, que llegar a ese momento sin ningún tipo de preparación. Porque, cuando no hay ninguna clase de preparación, una persona muerta sólo deja a sus seres queridos, un simple cuerpo muerto.
Y la verdad es que, un cuerpo muerto representa no sólo dolor para esos seres queridos, sino todo un complejo transtorno en las personas y sus bienes, ya que, los gastos funerarios son, en la mayoría de los casos, un serio golpe a las finanzas personales.
Tags: gastos funerarios
